Dentro del hotel más "convocante" en esta Liga Mundial, un grupo de 12 mujeres, casi tan llamativo como cualquiera de las selecciones foráneas pero que no son jugadoras, tienen cosas para contar. Se trata del equipo arbitral, ese que no tendrá fanáticas en el estadio, al que no muchos esperan en el lobby del hotel y que en realidad se ha mantenido al margen de las luces y los flashes que encendieron en Tucumán por este torneo.
Casi en silencio, arribaron a nuestra provincia el miércoles desde diez países distintos y con representantes de los cinco continentes, incluida América y Argentina, que tendrá dos representantes: Soledad Iparraguirre y Mariana Reydó. La primera, gestionó con sus colegas el backstage de la nota: les pidió que vistieran sus uniformes para la sesión de fotos y todas accedieron sin problemas. En la vestimenta no pasan desapercibidas: rojo, amarillo y azul serán los colores con los que dirigirán los partidos de uno de los torneos "más importantes", según ellas mismas.
Mientras LG Deportiva y el grupo de colegiadas se dirige hacia una de las salas de reunión del hotel, nos cruzamos con Luciana Aymar que se lleva todas las miradas. Saben que la atención está puesta en ella y el resto de las jugadoras y no se quejan, pese a que no reciben remuneración alguna por dirigir en el torneo. Pasajes, comida y alojamiento, el único combo disponible en esta parte del hockey que es amateur.
Todas ellas, tienen su profesión, más allá del silbato: Soledad es abogada, Mariana; profesora de Educación Física; Annelize Rostron (Sudáfrica), profesora de Ciencias; Frances Block (Inglaterra), maestra de primaria, Annabelle Willlox (Gales), ingeniera en sistemas; Amy Hassick (Estados Unidos) trabaja en una cafetería; Kelly Hudson (Nueva Zelanda), tiene una granja, Hyung Young Kang (Corea del Sur), entre otras. Lisa Roach (Australia), Fanneke Alkemade (Holanda) completan la delegación y están bajo el mando de las managers Yolande Brada (Holanda) y Minka Wooley (Australia). El segundo plano en el que a veces quedan se paga con la competencia a la que asisten: del más alto nivel. Para Alkemade, por ejemplo, es su primer torneo internacional importante y ya empieza a tomarle el gustito. "Venir a Argentina con la locura, en el buen sentido, que la gente tiene por el hockey, es genial", agrega. Si le dan a elegir a Roche, qué partido dirigir, no duda: "estando en Argentina, hacer un Holanda-Argentina sería increíble".
El choque podría darse recién a partir de cuartos de final y pese a las ganas de pitarlo, también saben que es un desafío. "Siempre es difícil porque han estado compitiendo mucho tiempo y en un nivel altísimo. Será difícil" , admite más calmada la "Jefa", como llama el equipo de jueces a Brada.
La mayoría quedó impactada por el fanatismo demostrado en estos días y pese a que no es con ellas, están acostumbradas y lo quieren en cada uno de sus partidos. Para Iaparraguirre, una de las representantes nacionales, es algo común pero no deja de darle placer. "Me siento muy bien aquí. Me gusta mucho ser local y además con esa condición puedo colaborar mucho con la atención a mis colegas", describió.
El decimotercer elemento de este grupo es Carol Metchette (Irlanda) que se ocupará exclusivamente del video ref, es decir las repeticiones por TV desde una cabina. Como sus colegas, no será de las más populares pero conforma un equipo indispensable.